- Año: 2013
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Fotografías:Alain Laforest
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Este proyecto fue proyectado para un sitio plano, escasamente arbolado. La casa original, construida totalmente de piedra, databa de principios del siglo 19 y sus proporciones eran equilibradas, pero la ampliación realizada a mediados del siglo 20 era un poco caótica.
Los clientes tienen cuatro hijos y una gran familia extendida. Esto los llevó a buscar un espacio que pudiese dar cabida a todos. La casa de piedra no podía satisfacer sus necesidades, y una extensión se hizo totalmente necesaria. Se examinaron diferentes escenarios, como hacemos a menudo, al comenzar el proyecto; ¿es posible mantener algunos elementos de la ampliación existente?, ¿podemos mantener las fundaciones?, ¿debemos construir una nueva extensión?. Tuvimos que tener en cuenta todas estas posibilidades para luego presentarlas a los clientes.
Al esbozar el alzado lateral de la casa centenaria, se nos vino la idea de replicarla justo al lado. Apareció de manera intuitiva un perfil idéntico en madera, como una copia contemporánea del volumen de piedra ancestral. La repetición del volumen simple hace eco de la historia del lugar. Las texturas antiguas y contemporáneas parecen dialogar, trayendo literalmente la arquitectura vernácula hasta el presente.
Las líneas de la casa existente se reprodujeron con sobriedad. Los volúmenes gemelos están ligeramente separados entre sí con el fin de dejar un espacio para el acceso. Un pasillo conecta los dos volúmenes y se extiende hasta que perfora la ampliación para crear una gran lucernario. En lugar de piedra, las extensiones están completamente cubiertas de tejas blancas de cedro.
Las habitaciones de los niños están en el ático de la vivienda antigua, mientras que el dormitorio del principal se encuentra en el primer piso de la nueva casa para preservar la intimidad de los padres; la gran claraboya en su dormitorio ofrece un lugar para sentarse y contemplar el bosque de pinos más abajo del sitio.
La planta baja de la casa ancestral esta completamente sin amueblar para crear un salón cálido y espacioso. En la nueva sección, nos encontramos con la cocina y el comedor de doble altura. La cocina es un elemento fundamental que conecta ambos volúmenes, y se observa un panorama completo de las distintas partes de la vivienda desde su gran mesón. El comedor tiene dimensiones suficientemente generosas que permiten dar cabida a muchos invitados. Este espacio blanco y luminoso contrasta con el ambiente acogedor e íntimo del hogar ancestral. Detrás de la pared de la cocina, un gran vestidor sirve para almacenar abrigos, botas, sombreros, esquis, etc.
El sitio muestra una ligera pendiente descendente hacia la parte posterior. Aprovechamos la oportunidad para generar un nivel con vistas al jardín, bajo la planta baja de la casa contemporánea. Incluye una suite para los invitados y una sala de estar.